El titular de la Asociación de Propietarios de Camiones (Aprocam), Ricardo Squartini, manifestó que si bien en las distintas playas de estacionamiento que hay en Mendoza para aguardar que abra el Paso a Chile se encuentran esperando unos 2.700 camioneros, falta que arriben a la provincia al menos 1.300 más. Son los que, aun habiendo realizado el despacho de la mercadería por Aduana, esperan en su lugar de origen.
“Esto ya es una locura”, calificó el referente este viernes, en diálogo con “Informe Nihuil”. Hasta el momento, no hay información acerca de una posible reapertura.
“Hemos venido elogiando a Vialidad en los cortes anteriores, cuando se mantenía la ruta despejada hasta la boca del túnel, de modo que cuando Chile estuviera listo empezáramos inmediatamente a circular. Pero esta vuelta el despeje ha sido muy lento“, evaluó.
Squartini aseveró que con estas demoras se desperdician ventanas climáticas y las jornadas se acumulan. “La ruta debería estar en condiciones siempre. Esta vez, el problema incluso se ha cobrado un par de vidas“, lamentó.
Choferes contenidos pero ansiosos
Poco antes, Squartini expresó que, si bien se encuentran atendidos y controlados por personal del Ministerio de Salud, muchos choferes ya han comenzado a sentirse ansiosos por la cantidad de días que llevan en vilo.
A la ya compleja situación se le sumó a la pérdida de los dos choferes que fallecieron a la espera de la apertura del Paso Cristo Redentor -uno proveniente de Chile y otro de Brasil- por distintas afecciones de salud. Lo ocurrido ha vuelto aún más tenso el ambiente.
“Después de tantos días hay que tener en cuenta que la gente empieza a ponerse un poco nerviosa, a pesar de que les pedimos que tengan paciencia”, manifestó el representante de los propietarios de camiones.
El problema es que, según detalló, cuando el Paso a Chile se abre, la ansiedad de los conductores por cruzar puede provocar accidentes.
Críticas a la falta de soluciones estructurales en alta montaña
En opinión de Squartini, que la problemática de los cortes en el Paso a Chile por los temporales en el invierno se haya vuelto crónica es responsabilidad de los sucesivos gobiernos que nunca han tenido la suficiente voluntad política de solucionarlo.
Esto para el empresario no tiene que ver solo con la construcción de un paso de baja altura, como se proyecta que sea el Paso Las Leñas, sino con intentar alternativas y fortalecer el diálogo.
“Yo me pregunto cómo hacen en Canadá o los países nórdicos donde nieva casi todo el año. Es importante copiar también de estos lugares, donde ya las crisis que pasamos nosotros todos los inviernos no suceden”.
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